12 enero 2009

Liga: Mallorqueta - R. Madrid (0-3): TIEMPO DE REFLEXIÓN.

24 horas después de la finalización del encuentro, ajeno a los arrebatos del momento y con tiempo para escuchar, leer y pensar, me dispongo a tratar de poner un poco de luz a todo esto.

Empezaré diciendo que por mucho que lo adelantase algún diario deportivo, no entendí que saliésemos en casa con una zaga de 5 frente a un vulgar Madrid, cuando lo habíamos hecho con 4, siete días antes, ejerciendo de visitantes y frente al actual líder. De acuerdo que no eran los mismos jugadores, de acuerdo que a la media hora habíamos pasado a un 4-4-2, de acuerdo a que sus dos primeras llegadas fueron dos goles..., lo que se quiera, pero una nueva probatura, una nueva alineación inicial, un nuevo planteamiento todavía más defensivo y con el resultado de 0 a 2 transcurridos 16 minutos, no tiene justificación alguna... ni lógica, diré, en defensa del mister.

A partir de ese momento y hasta el 0-3 siempre hubo algún resquicio para la esperanza, a ratos no se jugaba tan rematadamente mal, los de la capital no achuchaban ni exhibían un juego que nos hiciera sentir tremendamente inferiores pero esto empieza a oler molt malament.

A pesar de todo y vistas anteriores experiencias, no creo que la solución de todo pase por cambiar al entrenador; que grandes muestras de caballerosidad y profesionalidad está dando, con la que está cayendo; pero, don Gregorio, que cada año caemos en lo mismo, si es que damos unos bandazos que no hay quien se aclare, si es que los jugadores no saben donde tienen el pie derecho...

Los jugadores son los que son y no hay más cera de la que arde y sigo pensando lo mismo, no son como los de la temporada pasada, pero hay muchos más mimbres de lo que parece. Con un poco de suerte, con un poco más de ganas y con una línea un poco más clara... saldrán adelante.

Y llegamos al quid de la cuestión, al mal de todos los males, a la propiedad del Club; la total provisionalidad, la falta de una dirección clara, la incertidumbre constante, la falta de tesorería para unos necesarios refuerzos, etc., etc. son lo que menos necesita ahora nuestra querido Club y si no llega pronto una solución seria, juiciosa, ambiciosa, leal y con posibles, me temo que esto se vaya al garete.

A pesar de todo... ÁNIMO y aporellosoee, Mallorqueta, que siempre estaremos contigo.


Llama la atención:

- Que un vecino con nombre y apellido mallorquines, que no suele ir al fútbol, vaya con su hijo ¡¡¡para animar al Madrid!!!... país.
- Como me recordaba el planteamiento inicial a los que hacía mi admirado Clemente, pero sin laterales cualificados para el ataque.
- Que las dos primeras llegadas merengues acabasen en sendos disparos que finalizaron en dos goles como dos soles, with five defenders and one new goalkeeper!. La parte izquierda de nuestra defensa fue un auténtico coladero, era un espectáculo esperpéntico, sin quitarle méritos a un extraordinario Robben.
- Por favor, que alguien dé, de mi parte, una palmadita en la espalda a Lux quien, por cierto, no lo hubiese hecho peor.
- Que lo mejor de la jornada fuese la comida de antes del partido y la foto de la luna que os adjunto:
- Los mensajes de ánimo de Lolo el Charro (al que, por cierto, hemos defraudado) y el saber ganar con caballerosidad del irman Javier.
- La pinta de matones que tiene el dúo Pepe – Cannavaro.
- ¿Qué le pasa a Webó?
- Que podríamos haber acabado 1 a 1; me explico: el primer gol también parece en fuera de juego, como lo fue el tercero y nosotros, aunque el árbitro ya hubiese pitado un buen rato antes, metimos un gol en el min. 89. Total: 1 a 1 y justo reparto de puntos... ¿qué os parece?.
- Que no haya un pelotón de equipos a tiro de piedra para salir de esta situación.


El rinconcito político:

Hoy no está el horno para bollos pero que quede hecha una pequeña referencia a la ministra Maleni; ésta sí que mes que un crack, es un catacrack.


Ahora a centrarnos en nuestra competición, en la Copa, pasado mañana a resolver en Almería y que se prepare el siguiente... aporellosoee y hasta el miércoles,

Enrique


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