Liga: Hércules - Mallorqueta (2-2): ¡¡¡MILAGRO!!!

No creo que a ninguno nos haya gustado ser los que le hemos dado el golpe de gracia a los alicantinos, máxime cuando en sus filas militan nuestros viejos conocidos Rufete, David Cortés y Farinós pero la vida es así (y el fútbol "asín") y nosotros necesitábamos este punto como el pan.

Para los que ahora me puedan tildar de alarmista, simplemente un pequeño cálculo: de haber perdido frente al Hércules, lo que parecía lo más lógico y normal hasta 15 minutos antes de finalizar el encuentro, y la Real y el Zaragoza hubiesen acabado en tablas, lo que así fue hasta el minuto 88, ahora estaríamos a 3 puntos del descenso.

Hecha esta consideración o advertencia, en especial para los más escépticos, aprovechados y oportunistas, creo que podré confesar y no creo que haya sido el único, que ayer pasé un día de tremendos nervios en el que a cada minuto que pasaba veía todo más negro.

No sé si era bueno o malo que Laudrup repitiese once inicial pero cuando en el minuto 12 el tercer equipo menos goleador ya nos había “foradado” la meta, me temí lo peor porque además, ver con la facilidad y soltura con la que subió el lateral enemigo, comprobar que Cendrós no atinaba a despejar el centro desde la izquierda y avergonzarme de cómo Sendoa controlaba y se deshacía de nuestros dos centrales al mismo tiempo, fue para decir tierra trágame, ¿qué fistro de equipo es este?.

La cruda realidad no hacía más que certificar todo tipo de temores porque nuestros muchachos sólo eran capaces de acercarse a la meta del tercer portero rival, al que hacíamos bueno, a base de balones largos, casi siempre pasados o massa llargs. En verdad os digo que es difícil ver a un equipo al que le cueste tanto darse bien el balón como al Mallorqueta. Es más, hasta tengo la impresión que les vendría bien un petardo en el culo a cada uno porque no tienen la intensidad necesaria.

Y si no, como muestra un botón, en la última jugada de la primera mitad De Guzmán recibió el cuero en el centro geométrico del campo y no tenía ningún compañero en 20 metros a la redonda… ¿dónde estaban?.

Se acercaba el descanso (¡uy!, había escrito descenso) con la ilusa esperanza de que alguien pegase un puñetazo sobre las taquillas y pusiese a nuestros muchachos a trabajar pero antes llegaba el mazazo que se antojaba definitivo; enésima pérdida de balón al tratar de construir y el centro pasado desde la derecha lo engatilló de nuevo el killer Sendoa para batir a Lux por el palo corto. A perro flaco todo son pulgas.

Revolución, lo que se dice revolución, no se produjo tras el tentol, pero algo más de brío, por lo menos inicialmente, sí que le dieron es nostros, entre los que ya se encontraba Víctor Casadesús que había mandado a Cendrós a la caseta y reposicionado a Joao Victor como lateral diestro.

El arranque fue un espejismo porque si bien no llegamos a la calamidad de la primera mitad, poco a poco se fueron igualando de nuevo las fuerzas y todo hacía presagiar que llegaríamos al final con el 2 a 0 como mal menor.

Nos acercábamos al último cuarto de hora cuando un buen centro de Joao, sumado al ataque, lo tocó a duras penas el meta holandés, quedándole el esférico a los pies de Pereira que marró su intento de remate pero el balón le llegó a Webó quien, de espaldas a la portería vio sólo al algaidí, le cedió la pelota y goooooooooool del Mallorqueta, goooooooooooool de don Víctor Ca-sa-de-sús, que nos despertaba del anodino letargo.

¡Y “obrose” el milagro!, cuatro minutos después Ayoze saca rapidísimo una falta sobre la línea divisoria al ver que Webó iniciaba el desmarque que cogió en calzoncillos femeninos a la defensa alicantina y señores, ¡qué temple!, ¡qué maestría!, ¡qué "fropesionalidad"!, ¡qué obra de arte!, ¡qué filigrana!, vaya vaselina le hizo Pierre Achille Webgoooooooooooooooooool del Mallorca a Velthuizen.

De repente y tras cuatro minutos de oro, los de Djukic habían tirado el encuentro y la Primera División a la basura y nuestros chicos, sin saber muy bien cómo, habían empatado el partido, oe, oe, oe.

Visca el Mallorca!, ¡viva Baleares libre!, salvados, estamos casi salvados, aleluya, que corra el güisqui, "gin-flosquis" a mares, cubatas “protoquier”, cap a ses tortugues. En fin, que habíamos pasado de la más absoluta ineficacia y desolación consecuente a la rentabilidad hecha disparo y desbordante alegría tras los diez nerviosos y kilométricos minutos.

Las matemáticas se hacen de rogar pero ya no queda "ná".

Llama la atención:

- Que el árbitro estuviera hasta bien.
- El poco público alicantino que confiaba en la hombrada, parecía Son Moix en blanquiazul.
- La de cacauets que me comí.

El rincón político:

Pepiño sobre Rajoy, hoy jueves, día 12:
- “Ensucia la democracia”
- Exponente de esa derecha “autoritaria y antisocial, la más antigua y reaccionaria".
ZP, el martes día11:
- “Miente como un bellaco el que diga que hemos hecho recortes sociales”.

No es que los otros sean mejores pero de estos, el uno anclado en hace más de cien años y el otro de una desfachatez indescriptible.

Y el domingo, penúltima "cornada”, frente el descendido Almería (que nos eliminó de la Copa de Su Majestad el Rey don Juan Carlos I de España) al cual ganaremos porque ya no podemos resucitar, por muy colista que sea. En fin, que vamos aporellosoee y a ver si remontamos alguna posición por aquello de lavar la imagen.

Fins diumenge,

Enrique50