Vuelta al fútbol profesional, vuelta a la Segunda División, a la de plata, con la intención de permanecer para en breve dar el salto y regresar a nuestro sitio en el destino de lo universal... junto a los más grandes.
Por Enrique Mas Cassel.-
Sin sorpresas en el once inicial, basado en el del año pasado con la incorporación de Carlos Castro en lugar de Álex López y esperanzadora primera mitad con un soberbio Abdón (exagerando un poco) y
un equipo bien plantado, seguro de si mismo y con recursos.
Se salió alguna vez con el balón jugado pero se utilizó más
el patadón o pase largo en el mejor de los casos. Excesivas fueron las tarjetas que vieron nuestros muchachos para lo ocurrido sobre el
terreno de juego.
De dos claras ocasiones disfrutaron ellos en la primera mitad y por lo menos 4 pudieron acabar en gol para
nosotros, tuvo que llegar el minuto 44, un penalti, y gooooool de Abdongooooool.
Muy buenas sensaciones en esta primer acto, derroche físico y merecida recompensa desde los 11 metros.
La segunda mitad fue otra cosa, los rojillos apretaron más y a nuestros guerreros se les fue acabando el fuelle, las entradas de Baba, Valcarce y Faurlín por Castro, Aridai y Pedraza se hicieron escasas ante el clamoroso desfondamiento de Lago y Abdón (que se lo habían currado). Realmente no pasamos excesivos apuros aunque el susto de su gol anulado fue morrocotudo; por cierto, preciosa chilena y golazo pero anulado por juego peligroso (lo mejor que hizo el árbitro).
Además de la de Abdón (en la primera parte), mención especial para Fran Gámez por su poderío y solvencia, toque de atención para Manolo Reina (el risitas) y Raíllo por sus marrullerías y felicitaciones a todos, míster incluido, por esta primera victoria en este reencuentro con los candidatos a la élite.
El lunes 27 más y mejor en Madrid frente al Rayo Majadahonda.
Feliz semana,
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