Takefusa Kubo, Take como a él le gusta que le llamen, conocido como Kubo y Poal para los amigos de Sa Roqueta.
Por Enrique Mas Cassel.
Eran otros tiempos, agosto de 2019, dirigía el Club Maheta
Molango y al equipo Vicente Moreno, se acercaba el cierre del mercado de verano
y se anunció la llegada de uno de los diamantes en bruto del Real Madrid, que se había dado a conocer en
los alevines del Barça y que tras regresar a Japón había firmado por los
merengues apenas dos meses antes. A pesar de su aportación, no pudimos evitar el
descenso y tras dos fallidas cesiones a lo largo de la pasada temporada, a Villarreal y Getafe, y tras la vuelta a la Primera División de nuestro flamante equipo, regresa el nipón perdido, hello again, Take.
Pero vayamos al motivo de este post (o lo que sea esto),
¿qué tiene ahora el bueno de Luis García en sus manos?:
Sin olvidar que tiene 20 añitos recién cumplidos, no puedo
dejar de pensar en su falta de físico, mide 173 cm. y pesa 67 kg., raquíticas
cifras para enfrentarse a despiadados y mastodónticos enemigos. No lo tuvo
fácil el de Kawasaki para entrar en el equipo, empezando con esporádicas
apariciones para, a mitad de la primera vuelta, ser cada vez más habitual en el
once inicial.
Desde el primer momento dejó constancia de su calidad
aunque, desgraciadamente, muchas de sus acciones acabaran frustradas pero al ir
cogiendo confianza, acoplándose al equipo, atendiendo a lo que el míster esperaba de él y
consiguiendo goles además de dar asistencias, su aportación fue cada vez más
importante hasta convertirse en un jugador clave en el equipo, a lo que, por
cierto, está llamado a ser en este su regreso.
Recuerdo perfectamente mi constante referencia a su estatura
y escaso peso, que le hacían estrellarse contra muros defensivos, sigo
visualizando aquello intentos de dribling
de los que a veces salía triunfante pero de los que también, a menudo, salía
trastabillado. Y no se me olvida lo que con el paso de las jornadas comentaba
en los mentideros bermellones, el Real Madrid nos había dejado a un delantero
por pulir y le íbamos a devolver a un jugador comprometido en defensa; así era,
venía a hacer filigranas, a meter goles, a dar asistencias pero no entraba en
el esquema grupal de Vicente Moreno porque no venía con mentalidad de equipo humilde
que necesita que todos defiendan, además de atacar… y a ello se puso, convenciendo
al míster y demostrando sobre el terreno de juego su capacidad de sacrificio,
además de su juego natural.
Seguro que el año que ha transcurrido le ha fortalecido
físicamente y seguro que comprenderá de inmediato las necesidades para con la
zaga que Luis García le exigirá. A partir de ahí y visto lo visto (¿cómo olvidar su paso por Tokio 2020?)
, sólo puede
darnos alegrías. No sé en qué posición del ataque debe jugar (bueno, de ariete
cabeceador mejor no), en cuál puede rendir más, en cuál se siente más cómodo
pero lo que sí que sé es que será una pesadilla para las defensas, que aportará
goles y que con su colaboración lograremos la permanencia.
Benvingut a ca teva,
Take, enséñale el camino a Battaglia
y al 9 que ansiamos y que está al caer.
Amunt Mallorca y aporellosoee.
Ahora, en vez de poal, será bidón o tonel!!!
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